Diez cosas que no se olvidan por mucho tiempo que pase

Cuando éramos niños vivíamos todo con una intensidad superlativa, y es que teníamos primeras experiencias casi a diario. Todo nos parecía enorme porque se abría ante nosotros un mundo desconocido tras otro, quizás por eso todo se quedaba fijado en la mente y recordamos, a pesar de los años, todas esas cosas como si hubiesen ocurrido ayer. Hoy vamos a recordar diez de esas cosas que no se olvidan, por mucho tiempo que haya pasado, y por mucho que ya no nos sorprenda nada.

Pancho corriendo por la playa diciendo que Chanquete ha muerto (uno de los muchos traumas infantiles, gracias tele)

El primer día de clase (pero… ¿Por qué no se queda mamá? ¿Adónde va? Creo que me voy a poner a llorar…)

La melodía de Barrio Sésamo (Na-nana-nanana…)

El momento en que te daban la paga (y la tenías mentalmente gastada, peseta a peseta)

El olor a brasero de casa de los abuelos (aquellas mesas de madera con algo ardiendo a los pies eran muy misteriosas)

La primera película alquilada en el videoclub (esto… ¿Y sólo puedo coger una…?)

La letra enterita de La bola de cristal (culombio culombio…)

Las partes en que estaba dividido el Un, dos, tres (las preguntas, la eliminatoria…)

La primera bicicleta (aquello ya eran palabras mayores… Y esto trae el recuerdo de la primera caída)

Y aunque sea un tópico… El primer beso (cerrando los ojos y la boca fuertemente, como cuando te daban a comer una cucharada de puré)

También puedes ver:

La tecnología en tiempos de EGB
Diez cosas que nos parecían normales de pequeños (Y que ahora no tanto)
Cosas que haces que delatan que fuiste a EGB
Cosas que haces que delatan que fuiste a EGB, parte 2
Diez mentiras que nos parecían creíbles cuando eramos pequeños (y ahora no tanto)
Cosas que hacían o decían nuestros mayores y que repetimos ahora (por si acaso)
¿Cuántas veces has hecho…?
Topicazos EGB


Share this post

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


 
 

Comentarios (68)

  • chari Reply

    El olor a anis el dia d la loteria d navidad…cuando me levantaba
    estaba el anis en la mesa los mantecaos y mi madre con la loteria
    el boli y el papel…ese dia no se hacia nada hasta q no terminara el sorteo
    cuantos recuerdos!!

    16 mayo, 2013 at 08:58
    • Diana Reply

      Recuerdo de muy pequenita,cuando visitaba a mi abuelita,la rebanada de pan de hogaza y un trozo de chocolate de hacer o a la taza,tenia un papel azul clarito con la cara de un nino.
      A veces queria coger un trozo fuera de la hora de la merienda,pero no llegaba al cajon de madera con tirador
      metalico en forma de concha del mueble de la cocina.

      17 mayo, 2013 at 11:21
    • golo Reply

      A mí, todavía hoy cuando oígo el soniquete de los niños de San Ildefonso me pongo nostálgico, aunque no suena igual en euros.

      10 junio, 2013 at 21:17
  • Raquel Reply

    ¡Caray, caray!, ¡que de memoria colectiva!, tampoco se olvida el ¿Cómo están ustedes?, de los payasos, y la aventura del final.

    Mi primera bici era de color burdeos bajita (yo tenía 6 años), con cuatro ruedas, y las grandes eran gordas, en esa bici aprendieron mis hermanos, primos, no se si habrá algún cacho aún en el garaje del pueblo de mis padres.

    16 mayo, 2013 at 09:07
  • Vayatela Reply

    Uno más infantil: el olor de las gomas de borrar “Milán nata”. Y otro de cuando ya andaba por 7º de EGB, +/- : las peleas con mi madre por la moda de los vaqueros rotos y la de irse agarrando los puños de los jerseys con la mano, con toda la espalda encorvada. ¡Yo me sentía taaaan mayor, y aquella mujer amargándome!. La verdad es que ahora que soy yo la madre…se ve desde otra perspectiva.

    16 mayo, 2013 at 09:44
  • Aida Reply

    El sabor de la leche del pueblo, recién ordeñadita. Y la taza que me preparaba mi tía con la nata y azúcar, ¡¡qué delicia!!

    16 mayo, 2013 at 09:47
    • antonio Reply

      Sí deliciosa, pero habia que cocerla antes para eliminar las bacterias de las vacas. Y esa nata espesa.

      16 mayo, 2013 at 16:43
    • inma Reply

      El olor de la leche del pueblo, yo me la bebía sin hervir y siempre de la misma vaca, el olor en el pueblo de mis padres cuando te acercabas al horno a leña, el de los tomates y pepinos recién cogidos (ahora ni huelen si saben a nada), el empacho de pastas, turrón (solo lo vendían en Navidad) , los polvorones y las peladillas en Navidad, solo de verlos todo el día expuestos junto con el vino dulce para cuando venían las visitas. Y muchos recuerdos mas de una infancia para mi por lo menos muy feliz con muy pocas cosas.

      22 noviembre, 2013 at 11:23
  • encarna Reply

    mi colegio estaba en el campo , haciamos el camino de tierra , rodeados de flores , y la primaveraannciando la calor…lo que daria por volver andar por ahi..

    16 mayo, 2013 at 09:48
    • nostalgia a tope Reply

      como el mío, qué nostalgia!!!

      sigo viviendo en el mismo sitio, pero en aquellos prados de flores donde íbamos a recoger ramos para llevárselos a nuestras madres cuando nos portábamos mal, ahora sólo hay cemento. Aquellos preciosos ramilletes de maragaritas silvestres de todos los tamaños, amapolas que se chuchurrian recien cogidas, varitas de san josé, nazarenos, yemitas de huevo, campanitas… todas aquellas flores del campo a las que poníamos nombre segú su apariencia y con las que disfrutábamos como las niñás que éramos.

      lo que daría por tener una máquina del tiempo!!!!

      17 mayo, 2013 at 01:05
  • Son Link Reply

    Pues a mi nuca se me olvidan frases del cine como Luke, yo soy tu padre, Sayonara baby, Vivo o muerto usted vendrá conmigo, etc, la melodía de D’artacán y los 3 mosqueperros aun la recuerdo, la primera vez que jugue a un videojuego (la recreativa del Tetris), etc

    16 mayo, 2013 at 09:51
  • yerma Reply

    aisss yo soy de pueblo y lo que nunca olvidare son esa maletas de plastico con las que ibamso a la escuela y olian a una mezcla de plastico con olor a galletas y queso , parece asqueroso pero yo tengo buen recuerdo , y en verano salir los vecinos en corrillo a la calle, na de tele todos los niños jugando los mayores charlando

    16 mayo, 2013 at 10:04
    • nostalgia a tope Reply

      totalmente, nos comíamos el bocadillo en la calle mientras jugábamos a la regaña, al balontiro o a la gomilla.

      ninguno de nosotros estaba gordo

      17 mayo, 2013 at 01:06
      • Paco Reply

        Disiento. Sí había un gordo, yo, por eso jugaba de portero

        19 junio, 2013 at 05:20
  • Antonio Reply

    el commodore 64, el camino de tierra para ir al colegio, los montones de tierra donde “batallabamos”, el olor de los churros los domingos por la mañana, V, el españa malta (8 añitos tenía) un programa que se llamaba gente joven (alguien más se acuerda)… las fiestas de mi pueblo, los partidos en la plaza,… daría casi todo por volver a esa época…

    16 mayo, 2013 at 10:06
  • beatriz Reply

    Pues yo recuerdo el primer día que me hicieron una copia de la llave casa y la llevaba colgada del cuello con una cinta

    16 mayo, 2013 at 10:38
  • Veronica Reply

    Bajarte del autocar despues de nueve horas mareada, y ver a tus tios del pueblo despues d un año. Con ese frio q solo hace en los pueblos de montaña a las 7 de la mañana en agosto. Es lo mejor del mundo!

    16 mayo, 2013 at 10:52
  • MamenLi Reply

    Yo recuerdo el olor de aquellas mandarinas tan ricas que plantaba mi abuelo…jamás he vuelto a probar ninguna que se le patezca remotamente!!! También cuando mis padres me llebaban el desayuno al cole de preescolar, que estaba cinco casas separada de la mía, eramos 4 gatos y e desayuno consistía en un vaso de colacao servido en vaso color caramelo de duralex y una rebanada de tostada doblada por la mitad…que bien me sabía!!!

    16 mayo, 2013 at 11:08
  • Sara Reply

    Si tendré presente la melodía de Barrio Sesámo que es mi tono del móvil…..

    16 mayo, 2013 at 11:36
  • lucio Reply

    alguien se acuerda de como sacabamos partidas gratis en las recreativas con el calambre de los mecheros? snifff que tiempos

    16 mayo, 2013 at 12:13
    • Doc Reply

      Nada nada, en mi barrio eras el puto amo si llegabas con la mano a la palanca del cajón de las bolas del futbolín… horas y horas de diversión para 4 colegas con sólo 5 duros!

      16 mayo, 2013 at 13:26
    • bruno Reply

      Jajajaajjajaja ya te digo!

      16 mayo, 2013 at 14:01
  • ANM Reply

    Puestos a hablar de las cosas que no se olvidan, nadie olvida las primeras veces de…¿de esto no os habéis acordado?

    NO SEÁIS MAL PENSADOS…

    https://www.youtube.com/watch?v=Y18jIMMNoHA

    16 mayo, 2013 at 12:55
  • Davi Reply

    Nunca me olvidaré de la depresión que me cogí cuando murío David el Nogmo… que llantos¡¡¡¡¡
    Tampoco la verguenza ajena que sentí cuando en Verano azul, le vino la regla a Bea o Desi… eso de que ni el viento la toque… esa alegría por ser mujer…. DIOS QUE VERGUENZA AÚN HOY EN DÍA¡¡¡

    16 mayo, 2013 at 13:29
    • bruno Reply

      Buuuu! El final con Swift marchando solo por el bosque me destrozo!

      …coincido totalmente contigo!

      16 mayo, 2013 at 14:01
    • Nostálgicos Reply

      Juas, juas, aún recuerdo también cuando Bea “se convierte en mujer” y se entera todo quisque, qué vergüenza, por Dios, el Javi recitando aquello de ” que ni el viento la toque porque tiene pena de muerte eL viento si la toca…”, y la susodicha bajando a la playa tapadísima y diciendo a todos que no se podía bañar! Por Dios, aún se me ponen los pelos de punta al recordar ese episodio, jajaja!!

      18 mayo, 2013 at 04:45
      • Nieves Reply

        jAJAJAJAJAJAJ…. es ciertooooooo… a mi cuando me vino la regla por primera vez… mi madre hizo que fuera donde mi padre a decirle que ya era mujer… madre mía que vergüenza… sobre todo porque después del trago que fué… a mi padre le dió totalmente igual….. jajajajaj

        21 mayo, 2013 at 12:03
  • Sonia Reply

    La primera vez que fui al cine. Me llevaron mis tíos a ver el estreno de E.T., en el mejor cine de mi ciudad, el Teatro Colón. Mi madre diciéndome “cuando estés allí quítate el chaquetón (era invierno) que si no, cuando salgas, te va a coger el frío”. Estaba tan emocionada que me olvidé del chaquetón. Fue mágico, me olvidé de todo lo que me rodeaba, y me metí tanto en la película que cuando se encendieron las luces me di cuenta de que estaba llorando a mares y miré de reojo a un señor de bigote que estaba a mi lado para ver si él se había dado cuenta. Recordándolo ahora creo que el señor, que estaba muy serio y sin moverse mirando para la pantalla, estaba también aguantando las ganas de llorar.

    16 mayo, 2013 at 13:30
    • maria Reply

      Me encanta tu recuerdo y ET es uno de los iconos de mi infancia, mi padre nos llevo a mi hermana y a mi. Ella tuvo un monton de pesadillas con el pobre ET, yo me enamore del personaje para siempre.

      23 noviembre, 2013 at 22:28
  • bruno Reply

    el día que vi el último capítulo de David el gnomo y se convierten en árboles, Y Swift (el zorro) se queda sólo.

    Lo tengo grabado a fuego! Cuanto llore!

    16 mayo, 2013 at 13:58
    • Carmina Reply

      Somos muchos los traumatizados por esa escena :,(

      16 mayo, 2013 at 18:02
      • Jesus Reply

        ¡¡Que no se quedaba solo, hombre!!

        Swift encontraba después en el bosque a una zorra (zorra animal, que nadie piense mal…..), los dos se enamoran de un flechazo y se marcha con ella. ¿No visteis el capítulo entero?

        28 agosto, 2013 at 20:23
  • gema a Reply

    Yo a un me acuerdo de mi primer beso con lengua , me parecio delo mas asqueroso’,que recuerdos

    16 mayo, 2013 at 15:28
  • Carmina Reply

    Ver TRON una y otra vez. No me enteraba del argumento, pero me gustaban las motos.

    Sentarme a ver cómo mis hermanos mayores tecleaban o jugaban con el MSX que tenían, y el cambio de aquella tele de 9 pulgadas en blanco y negro por una de 14 y en color. Alucinábamos con nada, jeje.

    16 mayo, 2013 at 18:10
  • macarrasquilla Reply

    Aunque pasen años sin oírlas me acuerdo perfectamente de la letra de la mayoría de los dibujos animados de nuestra infancia.
    También recuerdo la mayoría de las canciones de los Hombres G y de La Guardia, y la letra de las canciones más famosas de aquella época: Gabinete, Loquillo, La Unión, Seguridad Social, Dinamita pa los pollos, Un pingüino, Héroes del Silencio, etc. Canciones como: Veneno en la piel, Chiquilla, Quiero tener tu presencia, Sabor de amor, Camino a Soria, Aquí no hay playa, Espiando a mi vecina, Héroe de Leyenda, etc.
    Recuerdo perfectamente mi primer beso, dónde y como.
    La primera vez que monté en bici y el golpazo que me metí (debajo de un camión).
    Etc.

    17 mayo, 2013 at 09:52
  • Nostálgicos Reply

    Las cancioncillas religiosas del tipo: “El 13 de mayo la Virgen María bajó de los cielos a Cova de Iría… Ave, Ave, Ave María… Aveeee, Aveee, Aveee Maríaa…”, etc, etc.

    18 mayo, 2013 at 04:50
  • Nostálgicos Reply

    “Viva la gente, la hay dónde quiera que vas. Viva la gente, es lo que nos gusta más, con más gente a favor de gente en cada pueblo y nación. Había menos gente difícil y más gente con corazón…”, etc, etc. Ay, esos sábados de catequesis!

    18 mayo, 2013 at 04:52
  • Nostálgicos Reply

    El anuncio navideño hippy de Cocacola: “Al mundo entero quiero dar un mensaje de paz…”, etc, y el árbol que se iba encendiendo y todos vestidos como para el festival de Woodstock. Qué bonito canto al amor, ay! :-)

    18 mayo, 2013 at 04:56
  • Nostálgicos Reply

    El precioso anuncio navideño de las muñecas Famosa que se dirigen al portal para hacer llegar al niño su cariño y su amistad… Lo recuerdo con ternura, me encantaba ver todas las muñequitas juntas en alegre procesion!

    18 mayo, 2013 at 04:59
  • quevuelvanlos80 Reply

    la primera pelicula que alquilamos en el videoclub……golpe en la pequeña chica
    la alquilamos el sabado y la vimos 5 veces hasta que el lunes la devolvio mi madre

    18 mayo, 2013 at 10:38
  • PHR Reply

    el día que me llevo mi herman a ver Grease..

    19 mayo, 2013 at 12:50
  • Mamen Reply

    Cuántos recuerdos! El chocolate recién hecho que hacía mi abuela, las tardes de parchís cuando llovía… Cuando fui con mi padre y mi hermano al cine a ver ET (todos llorando jeje), el pan con vino y azúcar , los yoplait… Me vienen a la cabeza tantas cosas que no acabaría nunca.

    20 mayo, 2013 at 18:15
    • pilimanili Reply

      Hoy le das a un niño pan con vino y llaman a los servicios sociales……

      22 noviembre, 2013 at 11:01
      • Anónimo Reply

        jajajajja

        23 noviembre, 2013 at 11:03
  • Nieves Reply

    Tengo el recuerdo grabado a fuego, de cuando mis hermanos y yo éramos peques y volvíamos a casa de cole en invierno, el olor de mi casa, de la ropa de invierno, de los jerseys de lana que picaban a rabiar… de los fines de semana cuando al mediodía veíamos los dibujos todos sentados (apilados) en el sofá (los 6) tapados con una manta (de esas grises militares, que también picaban un montón) y lo mismo te valía para el sofá que para salir a comer al campo… ays que tiempos…

    21 mayo, 2013 at 12:10
  • Laure Reply

    Volver del cole y ver a mi madre y las vecinas oyendo en la radio ” Simplemente María”. Hasta que no acababa no podía ni respirar..

    21 mayo, 2013 at 21:06
  • eerie Reply

    pues por las mañanas cuando era pequeño ponian en la radio una especie de serie q se llamaba los porretas. a mi ni me iba ni me venia pero si recuerdo las voces caracteristicas cuando mi madre la tenia por ahi puesta. pues eso, recuerdos de cuando uno es muy pequeño q se quedan grabados a fuego, conjuntos de sensaciones q se vivian por primera vez, sonidos, olores, imagenes, sabores… lastima no poder hacer reset y vivir las cosas igual otra vez siempre! seria la oxtia en rama

    23 mayo, 2013 at 11:19
  • peralta Reply

    Mis padres emigraron a Argentina cuando solo tenían 17 años, allí se casaron y nacimos mi hermano mediano y yo.
    Viviamos en el centro de Buenos Aires, para que os hagais una idea el equivalente a la Gran Via de Madrid.
    Cuando regresaron a España allá por el año 1975 yo contaba solo con tres añitos y recuerdo que en las calles de mi barrio concretamente ORCASUR se respiraba un aire con toques dulzones que a mi me encantaba.
    A tal punto me marcó ese olor , sin saber de donde provenía, que hace bien poco lo volví a oler y lo identifiqué instantaneamente y por fin tras 37 largos años le pude poner nombre y procedencia. Era simplemente el olor de la madera con la que la gente alimentaba sus chimeneas, e infernillos para calentarse en invierno, algo que yo en el centro de aquella gran urbe no habia olido jamas, pero que aquí en un pequeño y humilde barrio de Madrid era de lo mas normal.

    27 junio, 2013 at 17:12
  • Cinco sabores que no se olvidan (¿Cuándo probaste por última vez…?) - Yo fui a EGB Reply

    […] Diez cosas que no se olvidan por mucho tiempo que pase La tecnología en tiempos de EGB Diez cosas que nos parecían normales de pequeños (Y que ahora no tanto) Cosas que haces que delatan que fuiste a EGB Cosas que haces que delatan que fuiste a EGB, parte 2 Diez mentiras que nos parecían creíbles cuando eramos pequeños (y ahora no tanto) Cosas que hacían o decían nuestros mayores y que repetimos ahora (por si acaso) ¿Cuántas veces has hecho…? Topicazos EGB […]

    26 agosto, 2013 at 08:19
  • MANUEL GARCÍA CASADO Reply

    Yo lo que recuerdo de mi primera bicicleta, y única que he tenido porque llevo muchos años sin usar una (y ahora no tengo), es el accidente que provocó un camionero un día de de vacaciones en los días de fiestas en el pueblo donde aún voy de veraneo y durante todo el año. Íbamos a cruzar la carreta general que divide parte del pueblo (y eso que ya no se pasa, ni se pasaba en aquél momento por el centro del pueblo como antaño). Estaba yo bajado de la bicicleta esperando para cruzar como hacía siempre esperando junto a otras persona por el paso cebra (aún existe) hasta que no viniese ningún vehículo. De lejos venía un camión (Posteriormente supe que venía haciendo algo de eses por la carretera) y de repente se me hecha encima (a por mí). No se a día de hoy como pude reaccionar, pero me retiré hacia atrás y el camión (el conductor digo mejor) se llevó por delante la bicicleta durante unos 200 metros. El conductor bajó todo asustado. Supongo que yo más que él me quedé blanco: ¡No sé realmente como estoy vivo a día de hoy! Supongo que no era mi día de despedirme de este mundo. Y para terminar: El arreglo de la bicicleta costó unas 900 pesetas de entonces (años 70 o antes no recurdo bien aunque lo podría consultar que seguro mi madre se acuerda del año que fué más o menos) y nunca más quedó bien del todo. No todo era bueno, alegre en nuestros años de EGB: Algunas veces ocurrian desgracias como castigos y esto que he contado.

    22 noviembre, 2013 at 11:19
  • mari Reply

    No recuerdo mi primera peli del video club, pero sí recuerdo lo primero que grabé: el video de Madonna de What’s that girl?

    22 noviembre, 2013 at 11:27
  • Nostalgia Reply

    El olor a Navidad,los anuncios en la tele,y el “me lo pido”,salir en Navidad a pedir el aguinaldo,ahora los niños piden caramelos en Halloween…que triste!!!!,el olor del huerto de mi abuelo,las mañanas del sábado,esperar a mediodía para ver los dibujos,sentada en el sofá,con el brasero de picón,comiendo unas chucherias….Ufff,mil cosas,lo que daría por volver a tener ocho años….
    Un saludo para todos!!!!

    22 noviembre, 2013 at 11:46
  • Mauro Reply

    ¿Soy el único de toda la quinta que ODIABA Verano Azul? Pero es que hasta la musica !!!!!! :-(

    22 noviembre, 2013 at 12:28
    • Anónimo Reply

      ya somos dos

      22 noviembre, 2013 at 16:16
  • maria Reply

    jugar a los boliches con mis hermanos,k mi hermana mayor me intentara enseñar las mates k habia aprendido ese dia,comprar el pan de leña (todas las tardes)y untarlos con mantequilla o ajo y aceite(k ahora esta tan de moda ya existia señores),la sopa de mi madre los domingos x la mañana despues de k viniera de misa(8 de la mañana),la visita obligada a los tios en un dia(demasiados tios y pocas horas jajajajaj),la herencia de mis hermanos(ropa,juguetes y los libros de texto)….buffff demasiados recuerdos…..ahhh y yo tambien bebia leche de cabra sin hervir,recien ordeñada y siendo canaria con gofio….una delicia…..

    22 noviembre, 2013 at 13:01
  • Elena Reply

    Lo que no puedo olvidar mas que nada eran las tiendas de campaña con la mesa de la cocina rodeada con trapos, la merienda en la tienda de campaña mientras oia la radio (porque no habia tele por las tardes), a Matilde,Perico y Periquin y despues a Elena Francis, todo esto es finales de los 60 principios de los 70. Y por supuesto las radionovelas y las canciones dedicadas, Antonio Machin, Manolo Escobar, etc….. Ains que recuerdos.

    22 noviembre, 2013 at 14:25
  • Toni Reply

    En mi caso esta no vale: La primera película alquilada en el videoclub (esto… ¿Y sólo puedo coger una…?)

    Mis padres tenian un videoclub, jaja

    22 noviembre, 2013 at 16:12
  • Lyla Reply

    Recuerdo la noche buena, casi treinta personas a la mesa yo mis hermanos y mis primas liandola, cantando villancicos, hinchándome a turron de chocolate (del que sabia bien, ahora la mayoria está malisimo) El olor de mi abuelita, como la ayudaba a hacer mantecaos… La navidad se ha vuelto triste para mi.

    22 noviembre, 2013 at 18:51
  • Irene Reply

    El verano en el pueblo y ver, oir y oler cuando volvían las vacas de los prados a las cuadras. Mientras, esperábamos a que los mozos del pueblo fueran a ordeñarlas, después a cenar (allí todo estaba mucho más rico) y volvíamos a salir por el pueblo hasta que nos daban las mil. En el pueblo no había hora de vuelta.

    22 noviembre, 2013 at 19:34
  • Carlos_G Reply

    Estas dos melodías de videojuegos que no se olvidan en los recreativos o en los bares a finales de los 70 y principios de los 80:
    Galaxian
    https://www.youtube.com/watch?v=7Yjq2cGAWsk
    Pacman
    https://www.youtube.com/watch?v=uswzriFIf_k

    22 noviembre, 2013 at 20:53
  • Melina Reply

    Y la siesta??? La odiosa siesta de verano…

    22 noviembre, 2013 at 23:50
  • Anónimo Reply

    El olor pollo al’ast en la playa, el primer beso, las maletas en la baca del coche, las Navidades en familia con abuelos, tíos y primos, las despedidas del verano hasta el próximo año, Santa Lucía de Miguel Ríos, las juergas con las amigas, los niños de San Ildefonso, el señor del tiempo en blanco y negro de TVE, Don Cicuta, el “¡como están ustedeeeeees!”, los Chiripitifláuticos, la Casa del Reloj, …. tantas cosas… somos una generación tan grande y tan increible que nos estudiarán en los libros del cole dentro de 100 años. Una generación con el síndrome Peter Pan.

    23 noviembre, 2013 at 17:14
  • ana amigo pardo Reply

    Os bolígrafos perfumados de frutas que che daban ganas de ulir todo o que escribías na libreta, as golosinas que comprabas no quiosco de María de Buño antes de montar no bus para o colegio Beo Seaya, a serie V onde despois no parque xogábamos ós personaxes da mesma, acórdome cando escribía nun papel noticias tipo Telediario e liállas ós meus pais como se fose unha presentadora, timbrarlle ós veciños e esconderlle unha chave dun cortello a unha veciña no xardín doutra, ir á panadería dun familiar e pasarlle o dedo por riba do merengue das tartas, ah e estar pegada á cociña de leña en inverno da miña avoa,e moitas cousas mais.

    25 noviembre, 2013 at 13:30
  • Diez cosas que no se olvidan por mucho tiempo que pase, parte 2 - Yo fui a EGB Reply

    […] Diez cosas que no se olvidan por mucho tiempo que pase, parte 1 Cinco sabores que no se olvidan (¿Cuando probaste por última vez…?) […]

    27 mayo, 2014 at 00:01
  • kimbata Reply

    Yo recuerdo estar con toda mi familia viendo el un, dos, tres y la Ruperta primero, y la botilde después.

    1 junio, 2014 at 21:02

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies